Stellantis quiere crear la mayor red europea de cargadores rápidos para coches eléctricos, un proyecto de gran envergadura al que ha llamado Atlante. El grupo francés ha dado nuevos detalles sobre el proyecto, del cual ya han elegido los primeros 700 puntos y en el que España será una de las beneficiadas.
Tesla tiene su red de Supercargadores y Stellantis quiere hacer lo propio con Atlante. Muchas de las marcas que conforman el grupo Stellantis ya han anunciado la fecha en que pasarán a vender únicamente coches eléctricos, pero para que el mercado siga creciendo se necesita que la infraestructura vaya de la mano.
La ACEA (Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles) ya ha alertado en varias ocasiones sobre la falta de infraestructura de recarga y, sobre todo, sobre la escasez de estaciones de recarga rápida (de los aproximadamente 225.000 puntos de recarga disponibles actualmente en Europa, sólo 25.000 son de alta potencia). No hace falta emitir comunicados oficiales, basta salir y viajar para darse cuenta de las carencias de la infraestructura.
Y ahí es donde entra en juego el proyecto Atlante, cuyo objetivo es intentar poner remedio a esta laguna en la infraestructura de carga y convertirse en la mayor red de recarga del sur de Europa para 2030. Stellantis tiene previsto instalar en España, Italia, Francia y Portugal un total de 5.000 puntos de recarga rápida para 2025 y más de 35.000 para el año 2030. Las estaciones de recarga se instalarán principalmente cerca de las principales carreteras y en zonas urbanas densamente pobladas.
En el último comunicado de la compañía, aseguran que ya tienen elegida la ubicación de los primeros 700 cargadores, de los cuales 70 están ya en desarrollo (principalmente en Italia) y entrarán en funcionamiento en los próximos seis meses. Dependiendo de la ubicación de la estación y del tipo de recarga previsto ("sobre la marcha" o "en el destino"), las estaciones de recarga de Atlante también incluirán tejados con paneles solares incorporados y sistemas de almacenamiento con baterías recicladas, las llamadas baterías "de segunda vida".
La potencia de los cargadores de Atlante oscilará entre un mínimo de 100 kW y un máximo de 175 kW, lo que garantizará tiempos de carga bastante cortos. Si bien no está previsto ofrecer cargadores ultra rápidos por encima de 300 kW, Stellantis tampoco tiene en mente desplegar cargadores de 50 kW -que, para una recarga rápida en mitad de un viaje por carretera, resultan poco competentes y lo serán todavía menos en el futuro-. La red estará a abierta a los coches eléctricos de todas las marcas, si bien los clientes de Stellantis tendrán condiciones de servicio preferentes (los detalles se desconocen de momento).
El proyecto Atlante es el resultado de la colaboración entre el Grupo NHOA -que desarrolla e invierte en la red siendo propietario y operador- y Free2Move eSolutions, la empresa conjunta de NHOA con Stellantis, que a su vez suministra la tecnología de recarga (hardware y software).
