Hay coches que llevan en su ADN algo más de lo que podemos ver a simple vista. Más que un motor que actúa como corazón. Renault Rafale E-Tech 4x4 híbrido enchufable es uno de ellos. Con un nombre inspirado en un avión de combate de altas prestaciones, este SUV no sólo redefine la movilidad sostenible, sino que también establece un nuevo estándar en dinamismo, tecnología y diseño. Rafale pretende ser más que un coche para ofrecer una experiencia de vuelo sobre el asfalto.
Un legado en la aviación que se traslada a la carretera
Renault no eligió el nombre "Rafale" por casualidad. La marca tiene un profundo vínculo con la aviación, remontándose a los años 30, cuando colaboró en la producción de motores para aviones. De aquella época data el Caudron-Renault Rafale (C.460), un avión de carreras que batió varios récords de velocidad. Este legado sirvió de inspiración para el Renault Rafale, un SUV que traslada la precisión, la agilidad y la innovación tecnológica de los cielos a la carretera.
Diseño aerodinámico: velocidad con eficiencia
Desde el momento en que posas la vista sobre el Rafale, sus líneas aerodinámicas te cuentan una historia. Cada curva y cada ángulo han sido diseñados para maximizar la eficiencia, de la misma manera en que cada detalle en el diseño de un avión se refleja en pleno vuelo. Su agresiva parrilla frontal, las luces LED de sus faros matriciales o la inclinación del techo, al estilo fastback, evocan esa sensación de potencia y elegancia propia de la aviación moderna.
El diseño de Renault Rafale no es solo una cuestión estética, es un tributo a la eficiencia. Cortar el aire de la mejor manera posible reduce el consumo, tanto en un avión como en un coche. Y por supuesto, siempre está el componente puramente visual: tiene que atraparte por la mirada y el Rafale hace girar cuellos por donde pasa.
Motor híbrido eficiente: potencia que respeta el planeta
En el corazón de este vehículo late un propulsor híbrido enchufable que combina eficiencia energética y potencia en los momentos en que más se necesita. La transición entre ambos sistemas es suave y totalmente automática, aunque en la versión híbrida enchufable podemos elegir conducir en modo totalmente eléctrico: puede recorrer hasta 121 km en modo eléctrico sin consumir una gota de combustible, según homologación WLTP.
Hay momentos para la eficiencia y otros donde queremos una conducción ágil y dinámica. Con la versión 4x4 híbrida enchufable, tenemos 300 CV de potencia bajo el pedal derecho fruto de combinar un motor de gasolina de 150 caballos turboalimentado, tres motores eléctricos (dos delante y uno en el eje trasero) y una batería de 22 kWh de capacidad. De esta manera se garantiza una respuesta rapidísima y un 0-100 km/h en sólo 6,4 segundos. Además, la opción 4x4 proporciona un plus de tracción y estabilidad incluso en las condiciones más delicadas.
Tecnología avanzada en asistentes y conectividad
Renault Rafale no solo toma inspiración de la aviación en su diseño; también lo hace en su tecnología. Este SUV está equipado con los sistemas de asistencia al conductor (ADAS) más avanzados, que te hacen sentir como un piloto al mando de un caza. Desde el detector de ángulo muerto para detectar al enemigo acercándose por detrás hasta el control de crucero adaptativo o el sistema de mantenimiento de carril con centrado activo, el Rafale estará siempre un paso por delante del conductor para garantizar tu seguridad y comodidad.
Todos están diseñados para trabajar conjuntamente y responder con una precisión quirúrgica, como un avión ajustando su trayectoria en pleno vuelo. Aunque siempre podrás elegir tener tú mismo todo el control y disfrutar de su agilidad en curva con el sistema "4Control advanced" con dirección en las ruedas del eje trasero.
Todo ello combinado con la conectividad más avanzada que ofrece el sistema de infoentretenimiento openR link con Google integrado, que permite controlar desde los perfiles de conducción personalizables hasta la navegación o la gestión del consumo energético.
Una experiencia de conducción única
Sí hay un aspecto donde el Rafale gana por goleada a cualquier caza de combate: la ergonomía de su cabina. Mientras en el caza tenemos el espacio justo y mucho ruido, el interior del Renault Rafale destaca por su confort acústico gracias a cristales dobles en las ventanas y un profundo trabajo de aislamiento acústico y de vibraciones.
Las dos pantallas multimedia se combinan con acabados de alta calidad como el aluminio o textiles como el Alcantara, elementos de alta tecnología como el techo panorámico solarbay® y unos controles ergonómicos diseñados para tener todo a mano y retirar la vista de la carretera el menor tiempo posible. Todo está pensado para que el conductor sea el verdadero protagonista.
Renault Rafale es más que un SUV. Es una declaración de intenciones de Renault, una marca que mira al futuro, pero inspirándose y nutriéndose de su rica historia. El diseño y una tecnología puntera rinden homenaje a su legado aeronáutico. Hay coches que se conducen, pero el Renault Rafale se pilota. Y en cada trayecto, te recuerda que, como en la aviación, lo importante no es sólo llegar, sino disfrutar del viaje.