En España, el vehículo eléctrico está despegando, con un crecimiento interanual del 85% para los modelos propulsados por baterías y un 5,7% de cuota de mercado si incluimos los modelos híbridos. Con este mercado claramente al alza, las empresas energéticas líderes del mercado español se posicionan como un importante actor en la transición energética hacia la electrificación y la movilidad sostenible. Josep Trabado, director general de Enel X Iberia, ha relevado en una entrevista concedida a ABC su punto de vista sobre la eclosión del coche eléctrico y las acciones que emprende la energética española Endesa en torno a la infraestructura de recarga en España.
Preguntado acerca de la capacidad de la red española para recibir la electrificación del parque móvil, Trabado asegura que "la red española puede soportar sin problemas globales el crecimiento de los vehículos eléctricos". En cambio apunta que podrían surgir dificultades en bloques de pisos donde los inquilinos tuvieran un suministro que tensionara las necesidades de las viviendas. En cambio Trabado no se muestra en absoluto preocupado al respecto, ya que considera que la potencia disponible "se optimizará en función de la demanda y de los picos de consumo".
Para Trabado, la eclosión del coche eléctrico está condicionada a que exista una mayor oferta de modelos y que bajen los precios de los vehículos. Según el director de Enel X Iberia, "los precios de los vehículos (eléctricos) van a ir bajando" junto con el coste de las baterías, que "podría dividirse por cinco" en la próxima década. El segundo vector de crecimiento que propone Trabado es la infraestructura de recarga, que deberá ofrecer al cliente "la seguridad de que pueda moverse". En este sentido, Trabado explica que desde Endesa tienen el compromiso de incrementar la infraestructura en dos fases: la primera, de desbloqueo, "garantizará que el eléctrico se pueda mover por todo el país", y la segunda, de saturación, estará acompañada por el crecimiento del parque. "Hace falta un plan", dijo Trabado, no solo de ayudas, sino una solución integral en la que se impliquen "tanto Ministerios como administraciones locales". Con la actual legislación, "se tiene que soportar, además de la inversión, el coste fijo del término de potencia", algo que penaliza en gran medida cuando no hay usuarios que consuman.
Otra de las dificultades para el despliegue del coche eléctrico es que "si no tienes un garaje, solo puedes recargar en infraestructuras públicas", aseguró. En cambio, cuando se le preguntó acerca de los inconvenientes de instalar puntos de recarga en plazas de garajes comunitarios, Trabado aseguró que "no es un problema complejo: basta con informar al presidente de la comunidad". Acerca del proceso de instalación, el directivo comentó que "puede costar desde 900 euros" y que se trata de "tender un cable" desde el suministro al contador y, de ahí, a la plaza de aparcamiento. Trabado apuntó que la ley "obliga en las nuevas construcciones a poner un punto de recarga por cada cuarenta plazas". Aquí entra en juego la recarga inteligente, que repartirá la energía según las necesidades de los consumidores, y unas futuras políticas de precios más sofisticadas, que obligarán a "pagar más" a aquél que quiera cargar primero y beneficiarán a quien no le importe esperar.
Según Josep Trabado, viajar en coche eléctrico "tiene un coste ridículo", pues cargar el vehículo en casa y por la noche tiene un coste de unos 8 céntimos por kWh. Si consideramos un consumo medio de 20 kWh/100 km (los hay incluso que consumen bastante menos) "estamos hablando de apenas 1,6 euros a los cien kilómetros". Además, Endesa ofrece "recarga gratuita de 1 a 7 de la mañana" para los clientes que se acojan a la tarifa de Endesa para el vehículo eléctrico. En el caso de la carga rápida en estaciones públicas, poniendo como ejemplo un trayecto de Majadahonda a Madrid, Trabado estima un consumo de 23 euros mensuales.
En cuanto al tipo de conexión ideal, para el directivo barcelonés los enchufes domésticos "no están dimensionados ni diseñados" para cargar coches eléctricos, por lo que recomienda utilizar un "wallbox" por su "seguridad" y porque "establece un diálogo" con nuestro coche. Este tipo de conexión además permite conectarse mediante el teléfono y decidir a qué potencia queremos cargar. Endesa hace sus instalaciones compatibles con hasta 7,2 kilovatios en lugar de a 3,7 kW "pensando en la llegada de coches más grandes que carguen más rápido". Para la instalación de puntos de carga domésticos, Endesa tiene el compromiso con los concesionarios de las marcas que en 24 horas se contacta con el cliente y en las 48 horas siguientes se está en disposición de iniciar la instalación.
En el ámbito de la recarga de oportunidad, Trabado explicó que existe una norma europea de diciembre de 2014 que se decanta por el estándar alemán CCS Combo para la recarga rápida con corriente continua a partir de 50 kW de potencia. Del mismo modo, la conexión Mennekes es la opción estandarizada en corriente alterna hasta 43 kW, pero Endesa opta por incluir también el conector japonés CHAdeMO debido a que "está muy extendido". Con estos tres conectores se puede "dar solución al mercado", afirmó.
En cuanto a la procedencia de la producción energética, Josep Trabado aclaró que el coche eléctrico "permite descongestionar las ciudades" desde un punto de vista de sostenibilidad, sea cual sea la procedencia de la energía. Con el mix de generación que tenemos en España, la energía que consume un coche eléctrico "equivale a 40 gramos de CO2" por kilómetro. Los límites de un coche nuevo están en 130 gramos y para 2021 "el objetivo es de 95 g/km", dijo Trabado. Además, el director de Enel X Iberia aseguró que pronto "no habrá (contaminación) en ninguna parte", ya que "existe un proceso de descarbonización" y Europa obligará a que la generación de energía sea renovable.
Puedes leer la entrevista completa de J.R. Alonso publicada en ABC aquí.