Aunque ha tardado en llegar, aquí está. El Fisker Ronin fue presentado públicamente en un evento organizado por la marca hace unos días, donde se dieron a conocer hasta cuatro modelos diferentes que llegarán al mercado próximamente. Además del mencionado Ronin, también mostraron el esperado PEAR (el compacto de menos de 30.000 euros), el Alaskan (una pick-up 100% eléctrica) y el Ocean Force E (la versión deportiva del SUV eléctrico). Sin embargo, el protagonista de hoy es el GT descapotable, pues ya ha abierto su libro de reservas.
El Fisker Ronin está llamado a ser el modelo más exclusivo de la gama del fabricante norteamericano. Este vehículo eléctrico cuenta con una estética con la que será imposible pasar desapercibido. Su techo se podrá guardar en el maletero y así convertirse en un descapotable deportivo de lujo. Se estima que el modelo aterrizará con un precio de partida de nada más y nada menos que 385.000 dólares en Estados Unidos. Sólo se fabricará en una edición limitada a 999 unidades para todo el planeta.
Este, según los responsables de la marca, es el “primer gran turismo eléctrico descapotable y de cuatro puertas del mundo”. Dichas puertas cuentan con una apertura totalmente personal, ya que las dos delanteras se abren en diagonal y las traseras de forma invertida. Dan acceso a un interior con capacidad para cuatro ocupantes. Los datos proporcionados por la firma son del todo llamativos: cuenta con una arquitectura de tres motores eléctricos que le proporcionan tracción total y una potencia máxima de 1.000 CV, lo que le permite ejecutar el 0 a 100 km/h en apenas 2 segundos. Todo ello estará alimentado por una batería de gran capacidad (no se especificó volumen concreto) con una autonomía de hasta 1.000 kilómetros.
Donde también será especial el Fisker Ronin será en la propia fabricación de su techo. Aunque la mayoría de fabricantes actuales apuesta más por el uso de los materiales textiles, en Fisker han optado por una construcción rígida de fibra de carbono. Esta estructura se podrá guardar en la parte trasera del coche “en apenas unos segundos” (sin especificar cuánto tarda en ejecutar la maniobra).
En el habitáculo del Fisker Ronin destaca una pantalla central de formato vertical de 17,1 pulgadas junto a un cuadro de instrumentos situado en el centro del propio volante. Todo el interior está compuesto y tapizado por materiales sostenibles. “Se trata de redefinir el superdeportivo del futuro. Queríamos la mejor experiencia de manejo y un nuevo tipo de lujo. Buscábamos crear algo completamente diferente”, aseguró Henrik Fisker, CEO y fundador de la compañía al medio Autocar. “Este es un automóvil que sólo quieres conducir, no quieres pensar en cuándo tienes que detenerte”, añadió.
La compañía ya ha abierto el libro de reservas del Ronin. Está accesible para todos los interesados a través de su página web oficial previo pago de 2.000 dólares en concepto de reserva. Las primeras entregas están programadas para finales del año 2025.
Este será parte del proyecto de Fisker con el que quiere poner en circulación a más de un millón de vehículos eléctricos hasta el año 2027. Su comercialización ya está abierta en Europa, donde incluso comenzaron las entregas del Ocean antes que en Estados Unidos, su país natal.
