No hace mucho, Tesla era ninguneada por las marcas más tradicionales de la industria. A principios de la década pasada prácticamente nadie en el mundo fue capaz de adivinar la enorme transformación que iba a sufrir el mercado automovilístico global. Hoy, el panorama es completamente diferente. Tesla es la marca más famosa del mundo. Sus registros de 2024 demuestran que Tesla ha vendido más coches que Audi, considerado como uno de los mayores fabricantes de Alemania. Y eso que los de Austin no han tenido el mejor año. El cambio de roles es más que evidente.
El 2024 fue un año algo extraño para los intereses eléctricos mundiales. Si bien el volumen de vehículos eléctricos creció con respecto al 2023, quedó patente una desaceleración en el ritmo de matriculaciones. Tras más de una década creciendo sin parar, el año pasado Tesla mostró resultados negativos. Vendió menos coches que en 2023, pero aún así se alzó con la corona del mayor vendedor de coches eléctricos del mundo. Un total de 1,79 millones de unidades repartidas por todo el mundo demuestran su hegemonía. Una posición que por poco no fue usurpada por BYD. Apenas 24.234 unidades separaron a ambas compañías.
Audi no sólo se enfrenta a Tesla, sino a toda la industria china que está llegando
No es de extrañar que, viendo la progresión de BYD, este año se vuelvan las tornas, pero todavía quedan por delante 12 meses de intensa batalla. Lo que sí está claro es que Tesla ya ha superado a Audi en cuanto a volumen de ventas totales. Los alemanes cerraron el curso pasado con un total de 1,67 millones de vehículos matriculados en todo el mundo, un 12% menos que el año anterior. Si echamos la vista atrás, en 2017, Audi fabricaba 10 veces más coches que Tesla. La compañía de Elon Musk apenas matriculaba 150.000 unidades al año, mientras que los alemanes rozaban los 2 millones de coches vendidos.
La llegada de los Tesla Model 3 y Tesla Model Y lo cambiaron todo. Hoy Tesla es la gran referencia no sólo del mercado eléctrico, también del general. Tampoco se puede negar que Audi es la compañía premium alemana que menos interés ha mostrado en la electrificación de la flota. Los de Ingolstadt se han tomado con excesiva calma el lanzamiento de nuevos productos eléctricos. El año pasado las ventas eléctricas de la marca de los cuatro aros se comprimieron otro 8% hasta alcanzar un total de 164.000 unidades, según datos oficiales de la propia compañía. “Nuestra actual ofensiva de modelos muestra hacia dónde se dirige Audi. El año 2024 formó parte de una fase de transición hacia nuestra nueva cartera de productos”, ha afirmado el director general, Gernot Döllner.
Si bien la transición de modelos es más que evidente, Audi debería estar muy preocupada por la situación en la que se encuentra. La tendencia negativa es alarmante. La estrategia de Ingolstadt es dividir los esfuerzos. De cara a los próximos años, Audi hará de todos sus modelos pares coches eléctricos, como ya ha pasado con el nuevo Audi A6 e-tron. Mientras, los modelos impares como el Audi A5 mantendrán una estructura mecánica más convencional, incluyendo versiones MHEV y PHEV. Para este año esperan seguir lanzando nuevos productos, pero dado el exclusivo mercado en el que se mueven, ninguno de ellos llegará a tener el éxito comercial de un Model 3 o Model Y.