Tras haber tenido algunos contratiempos y quedarse en el aire por momentos, el Grupo Volkswagen, a través de SEAT S.A., ha confirmado que acepta el acuerdo con el Ejecutivo español y seguirá adelante con el proyecto de la fábrica de baterías ubicada en la localidad valenciana de Sagunto.
El Grupo Volkswagen seguirá adelante con la fábrica de baterías para coches eléctricos que tiene previsto construir en Sagunto (Valencia), tras superar las diferencias con el Ejecutivo español y aceptar las ayudas asignadas por el Ministerio de Industria. Ambas partes han llegado finalmente a un acuerdo, después de que Volkswagen llegase incluso a hacer un amago de huida con la fábrica española.
El mes pasado el gobierno de España anunció que Volkswagen y SEAT recibirían 397,3 millones de euros de fondos públicos, casi la mitad del total de 877 millones con que cuenta la primera fase del PERTE del vehículo eléctrico y conectado, un programa de financiación para impulsar la industria del vehículo eléctrico que cuenta con fondos de recuperación provenientes de la Unión Europea.
Sin embargo, la semana pasada, Wayne Griffiths, presidente de SEAT S.A., emitió un comunicado expresando el descontento de la compañía al considerar «insuficientes» los fondos públicos destinados al proyecto. En el comunicado proponía crear una mesa de diálogo para hallar una solución más conveniente para los intereses de la multinacional alemana «antes de 10 días».
Dicho y hecho, ambas partes han llegado finalmente un acuerdo. «SEAT S.A., el Grupo Volkswagen, PowerCo y las empresas del proyecto 'Future: Fast Forward' hemos aceptado la resolución del PERTE VEC y conjuntamente invertiremos 10.000 millones de euros en España», ha señalado el presidente de SEAT y Cupra, Wayne Griffiths.
Volkswagen y SEAT han aceptado los casi 400 millones de euros de ayudas, recalcando que es «un primer paso» en la búsqueda de más soluciones para seguir desarrollando su plan. El consorcio alemán espera que más adelante se concreten nuevas ayudas públicas tanto estatales como regionales para llevar a cabo el proyecto español. En una comparecencia ante los medios de comunicación, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha dicho que el gobierno central desembolsará otros 230 millones adicionales, de los cuales entre 95 y 110 millones irán destinados a la fábrica de baterías valenciana.
Esos casi 400 millones de euros se destinarán a la construcción de la fábrica de baterías y también a otros proyectos para fabricar vehículos eléctricos en las plantas de Martorell (Barcelona) y Landaben (Navarra), en los que participan en total otras 60 empresas vinculadas a la industria. Volkswagen tiene previsto invertir 10.000 millones de euros en nuestro país para convertir a España «en un centro europeo de producción de vehículos eléctricos y baterías».
A partir de ahora se abre un plazo de cinco días hábiles para presentar los avales exigidos y poder recibir el dinero de los fondos europeos Next Generation. Del total acordado inicialmente, 213 millones de euros son ayudas directas.
De los 10.000 millones de euros de inversión, más de 3.000 millones se destinarán a la gigafactoría de baterías de Sagunto. Contará con una capacidad de producción de 40 GWh anuales, dará 3.000 empleos directos y se encargará de fabricar baterías con celdas unificadas, una tecnología clave en la estrategia del Grupo Volkswagen. Está previsto iniciar las obras en 2023 y que esté totalmente operativa en 2026.
Las baterías producidas en la fábrica de Sagunto se instalarán en los coches eléctricos fabricados en Martorell y Landaben. A partir de 2025 las dos plantas españolas fabricarán coches eléctricos pequeños para las diferentes marcas del grupo (Skoda, Cupra, Volkswagen). El Cupra Urban Rebel, el Skoda Elroq y el Volkswagen ID.2 son algunos de los modelos eléctricos que previsiblemente se fabricarán en España.
