A finales de 2020, Skoda lanzará el Vision E, un vehículo 100% eléctrico que presentó como prototipo en el pasado Salón de Shanghái. No se sabe si recibirá finalmente ese nombre, pero lo que sí se conoce, según palabras de Alain Favey, jefe de ventas y marketing de Skoda, es que también recibirá una versión RS de altas prestaciones. Sin embargo, también ha confirmado que buscará algo más que las prestaciones. "Estará más enfocado hacia el diseño y la experiencia, no necesariamente en las prestaciones", dijo el directivo. al medio británico Autocar.
El Vision E RS se unirá una gama en la que actualmente solo hay el Octavia RS, aunque a finales de año llegará el Kodiaq RS. Favey admitió que no hay un plan definido para la gama RS pero cree que hay mercado para versiones así para modelos como el nuevo Fabia, que llegará después de 2020, y el Vision E.
Antes llegará el Citigo-e
Antes del Vision E, Skoda lanzará el Citigo-e, un pequeño urbano del tamaño del Seat Mii. Aun así, el lanzamiento del Citigo-e es considerado como una prueba para saber si tienen los medios necesarios para impulsar el proyecto eléctrico. "El primer gran paso será el SUV", dijo en el medio británico.
Este vehículo, que tendrá mucho del Vision E, se bastará en la plataforma MEB de Volkswagen, que utilizarán también todas las demás marcas del Grupo Volkswagen para sus eléctricos. Según palabras de Favey, la versión de producción del Vision E será "muy atractiva" y será un punto de partida para la futura gama eléctrica de la firma checa. En términos de tamaño se introducirá en la gama en medio del Karoq y el Kodiaq, con una batería, según el directivo, con una autonomía mínima de 300 millas, 482 kilómetros. "Si no tiene una autonomía de 300 millas, no debería salir al mercado", declara tajante Favey.
En cuanto al precio, el directivo no esconde que será un poco más caro que los demás vehículos de Skoda porque los eléctricos siempre son un poco más costosos. Es por eso que la estrategia pasará por intentar atraer al comprador con el poder adquisitivo suficiente. "Queremos llegar a un cliente base con el poder económico como para comprar un Kodiaq, por ejemplo", admite. De este modo, el precio del SUV eléctricos se podrá comparar con el de un Kodiaq bien equipado.
Skoda lanzará su eléctrico un poco más tarde que la mayoría de sus rivales, que empezarán ya el año que viene a lanzar sus primeros eléctricos. Sin embargo, Favey admite que la infraestructura no está al nivel que debe estar y que, para Skoda, tener dos años más para prepararse para una ofensiva eléctrica es una buena noticia.