El fabricante sueco de motocicletas Cake ha encontrado una forma de ser todavía un poco más ecológico. Algunos de los plásticos con los que actualmente fabrica parte de sus motos podrían ser sustituidos por un compuesto de fibra de papel que le ayudaría a reducir su huella de carbono. Para ello cuenta con una nueva asociación tecnológica con la empresa PaperShell, también sueca, que ha creado un material compuesto de fibra natural, sostenible, que asegura que es más resistente que el plástico al que sustituye.
Cake ha mostrado entre sus objetivos futuros la reducción efectiva de su huella de carbono. Para eso no solo fabrica únicamente motocicletas eléctricas sino que quiere añadir otras iniciativas que apoyen esta hoja de ruta. Tal y como explica Stefan Ytterborn, su CEO, "Cake se fundó para inspirar una sociedad cero emisiones y esto, naturalmente, implica investigar cuidadosamente los mejores materiales posibles para usar en nuestras bicicletas eléctricas".
Según las dos empresas suecas, Cake y PapelShell, el dióxido de carbono equivalente (CO2e) que se emitiría a la atmósfera con este nuevo material es mucho más bajo que el del plástico o la fibra de vidrio. Según cifras internas, el compuesto el PaperShell emite 0,65 kg CO2e por kilogramo de material, mientras que, por ejemplo, el polipropileno tiene 4,95 kg CO2e y la fibra de vidrio 25,05 kg CO2e. Si estas cifras son ciertas, la diferencia que supondría emplear este material es muy significativa.
Según Cake, las dos empresas trabajarán para evaluar las propiedades del nuevo material y las posibilidades de reemplazar con él algunos de los plásticos que ya se usan en sus motocicletas. El objetivo de la empresa sueca PaperShell para este nuevo material es que con él se puedan fabricar componentes sostenibles, prácticos y resistentes, y que además sean duraderos y compactos para que puedan ser empleados tanto en aplicaciones de interior como de exterior. El material también permite ser moldeado en diferentes formas y acabados utilizando los procesos de fabricación de Cake. Además, el compuesto es resistente al fuego, a los rayos ultravioletas, a los arañazos y a los impactos. También es hidrofóbico, es decir, repele el agua, lo que significa que al caer sobre é o salpicarlo no lo daña ni lo debilita, ya que no puede atravesar sus capas.
Las posibilidades de modelado reflejan que puede tomar muchas de las formas que actualmente se logran cuando se utiliza plástico o láminas de metal. Por último, cuando y para completar unas características esperanzadoras e interesantes, el material se puede reciclar al final de su vida útil en cualquier planta que actualmente sea capaz de procesar materiales de madera.
Todas estas características describen un compuesto que ofrece muchas posibilidades de ser industrializado para hacerlo económicamente viable. Si bien Cake se ha convertido en el primer fabricante en contar con él, también podría encontrar aplicaciones prácticas en otras industrias como por ejemplo la del mobiliario o la de la construcción ya que puede servir para fabricar paredes divisorias y revestimientos.
