Hyundai ha dado un giro importante a sus últimas presentaciones de los últimos tiempos. La firma coreana ha celebrado en las últimas horas el llamado evento ’N Day 2024’. Este certamen ha estado dedicado a la pasión y a la diversión por el manejo. Tanto es así que desde la marca han hecho público un nuevo modelo conceptual que evoca todos estos sentimientos. Concretamente ha sido un vehículo llamado Hyundai RN24, con un diseño ultra ligero, minimalista y con las prestaciones como principal atractivo.
“El RN24 ejemplifica el compromiso de Hyundai N de avanzar en la tecnología de los deportivos con motor eléctrico al priorizar la experiencia de conducción en lugar de los números y especificaciones. Este laboratorio rodante demuestra que aún existe potencial sin explorar para los vehículos eléctricos de alto rendimiento y, con las nuevas tecnologías que se avcinan, hay mucho que esperar”, afirmó Joon Park, vicepresidente de N Brand Management Group.
Hyundai muestra su propuesta de auténtico deportivo eléctrico
Salta a la vista que el Hyundai RN24 no es un coche convencional. Su estética es más similar a la de un kart que a la de un vehículo eléctrico al uso, ya sea tipo SUV, compacto o utilitario. En el frontal se deja claro su similitud con el lenguaje de diseño de otros modelos de la compañía. En la trasera se acoplan unos grupos ópticos con diodos LED con el diseño tipo ‘pixel’. También incluye un generoso alerón trasero, así como una jaula antivuelco que rodea todo el vehículo.
El habitáculo está enfocado en la pura competición. Sus dos plazas cuentan con unos baquets extremadamente deportivos, así como con un volante también de competición y otros mandos del mismo tipo.
El Hyundai RN24 se asienta sobre la misma plataforma E-GMP evolucionada del IONIQ 5 N. Al igual que el eléctrico deportivo que sí se comercializa, incorpora un esquema de doble motor eléctrico con 650 CV de potencia y una batería de 84 kWh de capacidad. No obstante, la compañía ha modificado levemente la mencionada plataforma para recortarle 340 mm, lo que hace que este vehículo eléctrico apenas tenga la longitud de un Hyundai i20.
Su enfoque natural es el de un coche de competición, aunque no podría estar homologado bajo ninguna liga explícita. Equipa, entre otras cosas, un sistema de vectorización de par con el que se pueden hacer impresionantes derrapajes a bordo. También integra una configuración de suspensiones explícitas, diseñadas para el mundial de rally, así como unos bastidores auxiliares de alta rigidez.
Por supuesto, este no será un modelo eléctrico que termine llegando al mercado tal y como se deja ver en estas imágenes. No obstante, sí abre la puerta a futuras soluciones deportivas para modelos firmados por Hyundai N.