CATL ha abierto el proceso de obtención de licencias con más de una docena de fabricantes de automóviles eléctricos asociados con vista a poder producir sus baterías. Esto proporcionará a la compañía china una mayor presencia en regiones donde hasta ahora están prácticamente vetados, al mismo tiempo que crecerán sus ingresos notablemente. Todo esto ha sido confirmado por un portavoz de la compañía en una charla que mantuvo recientemente con el medio CnEVPost.
Según lo que puntualizan desde el mencionado medio, en este nuevo modelo de asociación, CATL proporciona licencias de tecnología, servicios de operación y planificación de construcción de sus baterías. Todo ello, con la vista puesta en que los propios fabricantes de automóviles sean quieren aprendan a producir sus baterías bajo la ‘receta’ de CATL. Desde la compañía no solo aspiran a dar este tipo de licencias a marcas automovilísticas, sino que incluso hablan de proporcionárselo a su propia competencia, generando así nuevos ingresos hasta ahora nada explorados.
CATL busca la obtención de nuevos ingresos
Tal es este plan que CATL ya avisó hace unos meses de su búsqueda de nuevos ingresos. Sin embargo, el portavoz ha puntualizado en la entrevista con el mencionado medio que la capacidad de producción a día de hoy es limitada, por lo que la obtención de nuevos beneficios por ese punto se presentada alto complicado. Es por ello por lo que el plan mencionado anteriormnte es lo más viable a día de hoy. Como referencia, actualmente CATL cuenta con una capacidad instalada de 259,7 GWh en todo el mundo.
Por otro lado, estas nuevas licencias de producción podrían ir directamente vinculadas a las nuevas baterías de sodio que ya tienen prácticamente listas desde la compañía china. Estas pertenecen a la segunda generación de componentes desarrollados por la firma. Aunque bien es cierto que CATL está muy centrada en el avance de las baterías de estado sólido, algo de lo que ya hablaron hace unos días, lo cierto es que hasta la llegada de estas también están evolucionando convenientemente sus productos actuales.
La primera generación de estas baterías de sodio fueron presentadas el 29 de julio de 2021. En aquel momento con una densidad energética de 160 Wh/kg, generando así un nuevo récord mundial en aquel momento. La segunda generación de estas podría elevar esta cifra de densidad energética hasta, al menos, 200 Wh/kg.
No obstante, estas no llegarán para reemplazar completamente a las actuales de litio, sino que se posicionarán como alternativas para muchas compañías automovilísticas. Según afirman, la segunda generación de baterías de sodio “brillarán en muchas áreas”, no sólo por su mejor relación calidad/precio, sino también “por su buen rendimiento bajo grandes potencias y a muy bajas temperaturas”, afirmó el portavoz al mencionado medio.
Por el momento no han dado una fecha explícita sobre su llegada al mercado o su presentación al público. Sin embargo, esto es algo que podría ser una realidad en apenas uno o dos años, justo a medio camino hasta la llegada de las ansiadas de estado sólido.