Cuando hablamos de coches eléctricos siempre nos referimos a Tesla como el líder y el gran dominador de la industria, aunque su reinado está siendo amenazado por BYD. Sin embargo, cuando hablamos de la energía y los sistemas que mueven esos coches eléctricos es imposible no hacer referencia a CATL. La compañía china lleva más de una década liderando la industria de las baterías para vehículos eléctricos. Lidera no sólo por su capacidad de producción sino también por sus tecnologías. La compañía presenta ahora una nueva batería con la mayor potencia de carga jamás vista.
La nueva pila ha sido desarrollada junto con el fabricante SAIC-GM, la empresa conjunta que General Motors posee con el Grupo SAIC, uno de los grandes conglomerados chinos poseedor de marcas como MG. El objetivo de este desarrollo no se ha centrado exclusivamente en la autonomía o en la capacidad de la propia batería, sino que se ha focalizado en la potencia de carga. Los conductores han destacado que casi tan importante como el alcance es el tiempo de recuperación. Es por eso que los fabricantes de baterías se afanan en buscar nuevos y revolucionarios sistemas que hagan el uso del coche eléctrico algo completamente cotidiano.
Una potencia de carga extrema que reduce al mínimo los tiempos de parada
La infraestructura de carga pública sigue creciendo, según dónde se mire. Muchos puntos ofrecen destacadas potencias de carga, pero es la propia batería la que tiene que ser capaz de admitir semejante tasa de recuperación. Actualmente, la batería con la carga más rápida del mundo se encuentra en China, como no, con un multiplicador de carga de 5,5C. Eso quiere decir que la pila es capaz de cargarse por completo en 5,5 partes de una hora, es decir, en apenas 11 minutos. Al menos eso es lo que indica la teoría. El año pasado, el Li Auto Mega, un monovolumen eléctrico chino, estableció un nuevo récord de carga gracias a su batería con sistemas 5C. Recuperó 400 kilómetros de autonomía en apenas 10 minutos.
Pues bien, la nueva pila desarrollada conjuntamente con SAIC-GM y CATL ofrece un multiplicador de carga 6C, es decir, es capaz de cargarse por completo en un sexto de hora, 10 minutos. La batería se basa en una química de litio ferrofosfato (LFP), siendo la primera de su especie en ofrecer semejantes datos de rendimiento. La batería es capaz de ofrecer 200 kilómetros de autonomía, o más, con una carga de cinco minutos, lo que supondrá un alivio considerable para los usuarios más viajeros. Una nueva formulación de electrolito mejora la conductividad y reduce la viscosidad mejorando la desolvatación de los iones de litio, según especifica el comunicado.
La empresa ha anunciado que su nueva batería de alta potencia de carga estará disponible a partir del próximo año. Se ha desarrollado específicamente en la nueva plataforma Ultium de GM con sistemas de alto voltaje, 900 voltios. General Motors anunció su desarrollo allá por el año 2020 y desde hace relativamente poco los primeros coches eléctricos de la familia ya disfrutan de ella, como el Chevrolet Equinox EV o el más impresionante GMC Hummer EV. Sin embargo, estas unidades no disfrutan de su última evolución que contará, entre otras novedades con las nuevas baterías LFP de carga ultrarrápida desarrolladas con CATL.