En los últimos dos años, desde el poco añorado año 2020, se han ido sucediendo una serie de factores externos que han favorecido una falta de suministros para la fabricación de ciertos vehículos. Muchos pronosticaron que este problema desaparecería el próximo año 2023, sin embargo, desde la consultora Arthur D Little han llegado a la conclusión de que estos acontecimientos se terminarán por alargar más allá de ese año, a lo que agregó que podría haber incluso una mayor interrupción en el suministro de ciertos elementos, como los semiconductores.
Los últimos años no están siendo fáciles para los diferentes fabricantes automovilísticos, ya que se han enfrentado a muchas vicisitudes, entre las que se encuentran la pandemia del Covid-19, el aumento de la inflación que ha derivado también en un aumento en los precios de los vehículos, el actual conflicto bélico en Ucrania, así como la propia falta semiconductores que ha derivado en numerosos retrasos en la fabricación de coches. Sin embargo, la tensión que viven actualmente las relaciones entre China y Taiwán (principales productores de componentes electrónicos) podría agravar incluso más esta situación.
No obstante, a pesar de estos malos augurios, la mayor parte de las compañías automovilísticas han culminado la primera mitad de este 2022 con resultados positivos. Esto se debe a que la mayor parte de ellas se han enfocado en la fabricación y entrega de vehículos con un mayor margen de beneficios. Mercedes, entre otras, ya avisó hace algunos meses que priorizarían la fabricación de coches eléctricos y de modelos de alta gama precisamente por este mismo motivo. Adicionalmente, muchas marcas también están reduciendo los descuentos que hasta ahora proponían a sus nuevos clientes.
Asimismo, muchos de estos factores han derivado en un aumento en los precios de los propios coches incluso más allá del 10% de media, por lo que las dificultades han incrementado significativamente sobre una sociedad que comienza a contemplar la obtención de un coche como elemento de lujo, más que como una herramienta práctica para el uso en el día a día.
Desde la mencionada consultora Arthur D Little, afirman sobre esto que no habrá una solución a corto plazo. Aunque han sido muchas las nuevas fábricas que se han construido en los últimos meses para incrementar la fabricación de semiconductores, estas demoran una media de hasta tres años en estar plenamente operativas. Sin embargo, el mayor riesgo que se atisba a día de hoy es la relación entre los mencionados países orientales, pues en Taiwán se fabrican actualmente alrededor del 90% de los semiconductores avanzados de todo el mundo.
Una propuesta de solución a estos problemas que ya sufren y la acentuación que se avecina, desde Arthur D Little proponen la ampliación de contratos de renting, la estandarización de especificaciones y equipamiento de los coches, así como la creación de nuevas empresas fabricantes de estos componentes.
Desde la consultora admiten que esto puede llegar a derivar en grandes problemas económicos para muchas compañías, sin embargo, otros grandes perjudicados de esto serán los propios clientes, a quienes inciden en la posibilidad de acceder al mercado de ocasión, así como de otros vehículos de movilidad alternativa, principalmente para realizar el desplazamiento en entornos urbanos.
"No hay una bala de plata para acabar con este problema, pero hay algunas palancas que los administradores de flotas pueden accionar", aseguró Wolf-Dieter Hoppe, socio de la mencionada empresa consultora. "Hay que ser mucho más dinámicos. La situación es más compleja de lo que era antes e incluso podría agravarse aún más. No podemos predecir concretamente lo que ocurrirá en los próximos meses", concluyó.