Europa quiere independizarse de China en lo a tecnología y sistemas eléctricos se refiere. El Viejo Continente necesita producir sus propias baterías para coches eléctricos si realmente quiere lograr no depender de los asiáticos para impulsar los coches que darán luz a la normativa de 2035. Muchas de esas esperanzas estaban puestas en Northvolt, pero la semana pasada el sueño se rompió. La empresa sueca ha presentado la quiebra y con ella se ha puesto en peligro la aventura independiente de Europa. Sin embargo, hay vida y esperanza más allá de Suecia. Las marcas tienen sus propias agendas energéticas y son las compañías que más invierten.
No vamos a engañarnos. La quiebra de Northvolt puede ser un serio varapalo para los intereses energéticos de Europa en su agenda de electrificación. Europa lleva mucho tiempo intentando atraer a los fabricantes de baterías, pero la realidad es que estos se enfrentan a numerosos obstáculos burocráticos, altos costes de producción y una demanda de coches eléctricos más lenta de lo esperado. Según la firma de datos Benchmark Minerals, en 2024 la capacidad de producción de baterías de Europa hasta 2030 se habrá reducido en 176 GWh. Lo que equivale a casi toda la capacidad instalada actualmente en el continente.
Muchas plantas proyectadas para los próximos años
Actualmente hay 13 fábricas de baterías para vehículos eléctricos operando en la región. Países como Inglaterra, Francia, Serbia, Polonia o Noruega, cuentan con instalaciones que ya producen módulos de baterías. También en Suecia, en Skelleftea, donde Northvolt inició las operaciones en 2021. La fábrica debería haber empezado las obras de ampliación este mismo año, pero no ha sido así. Actualmente, la mayor fábrica de baterías de Europa opera en Polonia, en Wroclaw para ser más exactos. Se trata de una fábrica controlada por LG Energy Solution que produce actualmente 86 GWh de baterías anuales. Para el próximo año esperan alcanzar los 115 GWh de producción, equivalentes para movilizar a unos 100.000 coches eléctricos.
Si bien el volumen instalado no es muy potente, por todo el continente se están realizando obras muy importantes que permitirán a Europa independizarse un poco más de China. Estas se ubican en países como Reino Unido, Bélgica, Finlandia, Francia, Alemania, o España. Sagunto va a recibir la tercera de las Gigafactorías de baterías de Volkswagen, además de dos centros adicionales en Navalmoral de la Mata y Valladolid. En total están programados 112 GWh de baterías anuales en nuestro país. La mayor fábrica de Europa ya se está levantando en Hungría, en Debrecen. Estará operada por CATL y ella sola será capaz de suministrar 100 GWh de energía al año.
La peor noticia es que la quiebra de Northvolt no es exclusiva. Dada la lenta adopción de vehículos eléctricos, muchas marcas han renunciado a abrir sus fábricas de baterías en Europa. Hay un total de 7 plantas en espera, incluyendo una fábrica de Northvolt en Gotemburgo con una capacidad prevista de 50 GWh anuales. A estas se suman tres operaciones definitivamente canceladas en Finlandia y Noruega. La más grande iba a instalarla SVolt en Finlandia, con una previsión de fabricación de 50 GWh anuales. La empresa ya ha anunciado su cancelación definitiva. Europa necesita reducir su burocracia y facilitar la producción si realmente quiere impulsar su estrategia eléctrica y reducir la dependencia frente a China.