Apple abrió la veda hace algunos años al comenzar a filtrarse su intención de convertirse en una empresa tecnológica que fabrica coches. Esto dio pie a que muchas de sus competidores principales, como Xiaomi o Huawei, no dudaran en seguir sus pasos y crear también su propia ofensiva en forma de coche eléctrico. Ahora parece que Huawei renuncia a tal intención y se decantará por ayudar a otros fabricantes asociados a hacerlo gracias a un software propio.
Huawei poseía hasta ahora uno de los más prometedores proyectos de coche eléctrico de entre las firmas tecnológicas, ya que su software propio hacía gran parte de esta labor positivamente. En la carrera por lanzar su propio vehículo, Xiaomi es la que actualmente se encuentra a la cabeza de todas, pues oficialmente ya anunció su entrada en dicho mercado y proporcionó una gran cantidad de detalles sobre su futuro coche eléctrico de gran tirada. Apple, por su parte, continua con un nivel de secretismo propio de la firma de Cupertino y poco o nada se sabe sobre el estado actual de su proyecto más allá de que descartaron continuar con la búsqueda de socios estratégicos y optaron por encarar motu proprio el desarrollo y fabricación del modelo.
La firma Huawei llevaba un tiempo sin dar noticias sobre su proyecto automotriz, pero en los últimos días han saltado todas las alarmas en el momento en que uno de los directivos de la corporación negó públicamente la intención de construir o desarrollar un coche eléctrico, aludiendo que el cometido principal de la empresa en este momento es aportar el software necesario a otras corporaciones. Esto realmente tendría mucho sentido ya que el recientemente estrenado sistema operativo Harmony tiene como una de sus capacidades primordiales la propia experiencia automotriz.
Durante la Super Car Conference de China, Wang Jun, presidente de Huawei Smart Car Solutions, aseguró públicamente que la corporación tecnológica no fabricará automóviles, ya que únicamente se encargará de trabajar con sus socios de proyecto en hacer que esto se lleve a cabo, lo que supone que la propia empresa no tendría planeado expandirse en el mercado como nuevo fabricante de coches eléctricos y se centraría en dotar de tecnología y software a las corporaciones que realmente sí estén interesadas en llevar a cabo tal labor.
Estas nuevas afirmaciones por parte de la directiva de la propia marca de origen chino, no redundaría en una respuesta completamente firme con el paso del tiempo, ya que son muchos los que opinan que estas publicaciones únicamente se están llevando a cabo como forma de distracción y ocultación de sus propósitos reales, el lanzar su propio coche eléctrico. Muchos rumores hablan sobre la posibilidad de que esto suceda durante la segunda mitad de esta década, potenciado parcialmente por las empresas asociadas para incorporar el mencionado software propio de Huawei sobre sus vehículos.
Sea como fuere, el sector de las empresas tecnológicas se está moviendo en una clara dirección que apunta al vehículo eléctrico. Esto se ha motivado en los últimos años gracias a lo que representa el propio coche eléctrico como dispositivo tecnológico más que mecánico, como ha supuesto hasta ahora. La segunda mitad de esta década se presenta interesante para este nicho, con el lanzamiento del coche firmado por Xiaomi, así como la posible incorporación de Apple y Huawei.