La batería sigue siendo el elemento principal de todo coche eléctrico. Por muy potente o eficiente que sea un motor da igual si este no tiene energía. Así es y así seguirá siendo. Las baterías de alto voltaje no van a desaparecer ni van a reducir su importancia, todo lo contrario en realidad. Cada vez habrá más vehículos eléctricos circulando por el mundo y ese aumento supone un beneficio para todos. La economía de escala permite reducir el precio de las baterías. Este 2024 ha caído significativamente, está a punto de superar una barrera muy importante y las previsiones son muy optimistas.
Hace casi una década, cuando los coches eléctricos eran todavía un elemento extraño en nuestras carreteras, el precio del kWh de batería costaba más de 1.100 dólares. El precio de una batería de 80 kWh de capacidad rondaba los 90.000 dólares. La mayoría de los coches eléctricos eran caros, exclusivos y poco asequibles al público general. Hoy vivimos una era completamente diferente. Las baterías han reducido sus costes. Hoy son más baratas que nunca. Un estudio de Bloomberg ha concluido que actualmente el precio del kWh de batería se cotiza a 115 dólares. La misma batería de 80 kWh que en 2017 costaba más que muchos coches, hoy cuesta poco más de 9.000 dólares.
Baterías baratas y coches eléctricos baratos a partir de 2026
2024 no está siendo el mejor año en cuanto a ventas de vehículos eléctricos. Desde principios de año la situación se ha ido complicando cada vez más. Vivimos tiempos inciertos, aunque la demanda y la oferta son ahora más altas que nunca. A pesar de ello, el precio sigue siendo uno de los principales problemas del coche eléctrico. Los conductores necesitan vehículos más baratos y eso pasa por hacer las baterías cada vez más económicas. Muchos consideran que una vez rebasada la barrera de los 100 dólares por kWh de batería los fabricantes estarán en disposición de ofrecer coches eléctricos de precio razonable. Al menos eso es lo que dice una teoría que no tiene en cuenta otros factores externos como conflictos comerciales o la inflación.
A pesar de que la situación no es la que todos esperaban, los analistas se muestran optimistas con respecto al futuro a corto plazo. Bloomberg estima que en 2026 el precio de las baterías caerá por debajo de los 100 dólares el kWh, llegando a los 69 dólares a finales de la década. China es la muestra más evidente de que una vez superado el horizonte de las tres cifras el precio de los vehículos también cae significativamente. También hay que tener en cuenta que los chinos tienen a su alcance sistemas, tecnologías y procesos que el resto del mundo no tiene. En China se instalan los dos principales fabricantes de baterías del mundo, CATL, especializada en las pilas de litio, y BYD, enfocada exclusivamente en las baterías LFP.
El ya mencionado estudio realizado por los analistas de Bloomberg recoge: “se espera que China, por sí sola, produzca suficientes celdas de batería para satisfacer el 92% de la demanda total mundial de 1,2 teravatios hora para vehículos eléctricos y almacenamiento estacionario en 2024". “Esto ejerce una presión a la baja sobre los precios de las baterías. Los fabricantes más pequeños están siendo desafiados y presionados por sus competidores más grandes para bajar los precios de las celdas”. Ahora sólo falta que las condiciones del mercado mejoren. El entorno competitivo anima a reducir los precios y muchas marcas tienen previsto lanzar coches realmente económicos.