Ya sabemos que a Elon Musk, CEO de Tesla, es proclive a dejar algunas noticias interesantes en su perfil de Twitter, a veces respondiendo a otros usuarios de manera cordial. Y, de nuevo, ha sido en esta red social donde el empresario ha asegurado que Tesla está «abierta» a vender y suministrar su avanzada tecnología a otros fabricantes de automóviles que quieran producir coches eléctricos.
Elon Musk ha asegurado en Twitter que en Tesla están «abiertos a licenciar software, suministrar propulsores eléctricos y baterías» a otros fabricantes, ya que su intención -dice- es acelerar el uso de energías más sostenibles y no «machacar» a sus competidores. Dicho de otra forma, Tesla estaría dispuesta a vender la tecnología de sus coches eléctricos a aquellos fabricantes que estuvieran interesados. Según Musk, eso incluiría también el Autopilot, aunque tiempo atrás había asegurado que dicha tecnología sería difícil de implementar en otros coches ajenos a la marca estadounidense.
Tesla is open to licensing software and supplying powertrains & batteries. We're just trying to accelerate sustainable energy, not crush competitors!
— Elon Musk (@elonmusk) July 29, 2020
La ventaja tecnológica de Tesla en algunos aspectos de sus coches eléctricos, como la eficiencia energética de todo el sistema propulsor o lo avanzado de su software, ha propiciado que en los últimos meses algunos fabricantes reconozcan la superioridad de la marca estadounidense. Herbert Diess, ex CEO de Volkswagen, reconoció en una circular interna a sus empleados que la superioridad de Tesla en materia de software y conducción autónoma le provocaba «dolores de cabeza», y aseguraba estar «preocupado» porque Tesla está «por delante de Volkswagen y de cualquier otro fabricante de coches». Precisamente uno de los motivos del retraso del lanzamiento del Volkswagen ID.3 han sido los numerosos problemas con su software, que no estará completo hasta el año que viene.
También el CEO de Audi, Markus Duesmann, hace apenas unos días declaró abiertamente que Tesla está «dos años por delante» en términos de arquitectura informática y de software, y también en conducción autónoma. Según algunos analistas, la ventaja tecnológica podría ser todavía mayor si nos fiamos en la unidad de control central integrada, el cerebro neuronal del Autopilot 3, una arquitectura electrónica que reúne las unidades de control más importantes. Algo que otros fabricantes deciden fabricar como elementos separados, con menor nivel de integración.
En 2014 Musk anunció que Tesla liberaría sus patentes para que otros fabricantes pudieran impulsar el desarrollo de sus coches eléctricos. No obstante, no era un «código abierto» en todo el sentido de la expresión; Tesla prometió no demandar a ningún fabricante que utilizase sus patentes «de buena fe». Dicho de otro modo, si copiases el diseño del coche podrías tener problemas legales, pero sí que podrías copiar de Tesla su mismo método de fabricación de las baterías o los motores eléctricos.
