El ciclista de Husqvarna e-Bicycles, Simon Carlsson, ha aprendido en su país natal, Suecia, el arte de pilotar una bicicleta eléctrica de noche, algo normal en un país con tan pocas horas de luz en el invierno.
Y es que poco a poco se ha tenido que ir adaptando a la conducción nocturna con su eMtb, ya que lo que quería era explorar todas las posibilidades de este tipo de monturas en un país como Suecia. Porque Carlsson, sabedor de que o se adaptaba o dejaría de montar en bicicleta durante unos cuantos meses, ha experimentado en primera persona el ciclismo nocturno, actividad que recomienda encarecidamente hacer aunque sea una vez en la vida.
¡Lo que he aprendido conduciendo una eMtb por la noche!
Son palabras del propio Carlsson: y es que, evidentemente, la especial atención que hay que poner en un momento en el que la visibilidad brilla por su ausencia, hace que, poco a poco, el nivel técnico de pilotaje vaya en aumento. Simon, en la propia página web de su marca, Husqvarna, nos da unos consejos para que la experiencia nocturna sea total.
1.Dónde posicionar mejor la luz
“Hay montones de opciones en cuanto a luces y merece la pena invertir en una de buena calidad por su visibilidad, capacidad de la batería y facilidad de transporte. Yo utilizo una luz, fijada al casco. Es ligera, pero también robusta para su fijación al casco y puede soportar la dura climatología sueca. Con un potente haz, creo que con una sola luz fijada al ciclista, es suficiente. Si la luz está fijada a tu casco, mires donde mires la luz siempre apuntará en la misma dirección”, comenta Simon al respecto.
2.Capacidad de la batería
“Mi luz tiene 4000 lúmenes, que es super potente. Eso es más o menos lo que necesitas para ver adónde vas. Normalmente la hago funcionar a toda potencia. Así gasta más batería, pero a mí me dura unas dos horas y media en este modo, lo que es más que suficiente. La batería está separada de la propia luz” . Y es que Simon tiene claro que lo más importante es usar la potencia máxima, nada de medias tintas. Así que él necesita una batería que le dure, aproximadamente dos horas o dos horas y media, para que le sobre autonomía por si acaso (noo suele salir a rodar más de una hora).
3.Una hora de ruta es bastante
“Mi opinión, es que en general, con una hora de bicicleta es suficiente. A mí es lo que mejor me funciona. Sé que la batería de mi linterna dura más de dos horas, pero me gusta tener en cuenta el tiempo que puede pasar si surge algún problema, como por ejemplo, un pinchazo. El ciclismo nocturno no es para entrenar, es sólo para divertirse“. Nos gusta eso de divertirse: rodar de noche es, por norma general, algo más peligroso, así que no se trata de pegarnos una paliza, se trata de divertirnos y no correr riesgos.
4.Abrigarse como una cebolla
“La gente a veces olvida que el ciclismo nocturno es mucho más frío que el diurno, y aún más en invierno. Necesitas llevar capas adicionales. Empieza con una capa base de merino, luego un jersey, un chaleco exterior y remátalo todo con una chaqueta exterior para mantener el calor. Ponte un buff alrededor del cuello, guantes de neopreno y sobrebotas para mantener secos las zapatillas y los pies”, comenta Carlsson. Y es que tenemos que adaptar nuestra vestimenta en función de la geografía en donde vivamos pero, como él dice, teeniendo en cuenta que de noche no es igual que de día.
5.Mejor en grupo que en solitario
Esta recomendación creemos que es fundamental para rodar, no solo de noche. “A veces sólo es posible salir en solitario, pero siempre es más divertido (y más seguro) hacer una ruta en grupo con amigos. Prefiero salir con mis amigos que ir solo. Nos reímos más y nos ayudamos entre nosotros en caso de surgir algún problema”.
6.Mejor salir por zonas conocidas
“Por la noche, todo parece y se siente completamente distinto. Incluso aquellos senderos que te conoces como la palma de tu mano. Mi consejo es que te ciñas a los senderos locales que conozcas, que estén bien señalizados y no sean demasiado técnicos. No te vuelvas demasiado loco con estas salidas. Pedalear de noche y con visibilidad limitada dificulta incluso los tramos azules más tranquilos”. No hacemos comentarios de las palabras de Simon, creemos que está claro y cristalino.
En definitiva, rodar por la noche en bicicleta es una experiencia muy diferente a hacerlo con luz. Y Simon nos invita a hacerlo alguna vez: "Vale, puede que no exista el hombre del saco, ¡pero el bosque tiene una sensación extraña por la noche! Puede llegar a dar un poco de miedo, pero a mí me gusta así. Con sólo una luz para guiarte, todo está más quieto, más tranquilo de algún modo, y no puedes ver lo que sucede a tu alrededor como durante el día. Por la noche me siento más libre sobre la bici y disfruto mucho con este estilo de ciclismo. Es algo que hacemos mucho en Suecia, ¡pero sin duda, todo el mundo debería probarlo alguna vez!"