La bicicleta y el patinete eléctrico se han convertido en medios de transporte muy interesantes desde el punto de vista de la movilidad en la ciudad. Estas soluciones permiten ahorrar debido a su bajo coste de mantenimiento, ausencia de permiso de conducción u obligatoriedad de seguro correspondiente. Esto ha provocado que su crecimiento en el mercado se haya disparado a lo largo de los últimos años. Más todavía si vemos cómo el precio de los combustibles ha alcanzado niveles jamás antes vistos en la serie histórica.
Entre los usuarios que podemos encontrar de estas alternativas, indudablemente debemos situar a los menores de edad. Pese a que hay disparidad entre municipios, la edad mínima establecida por la Dirección General de Tráfico (DGT) son los 16 años. Ahora bien, ¿qué ocurre si a un menor de edad le ponen una multa? Veamos qué es lo que sucede y quién puede tener responsabilidad sobre cualquier infracción cometida.
Qué ocurre si a un menor le imponen una infracción relacionada con la bici o el patinete eléctrico
El patinete eléctrico se ha convertido en el deseo de cualquier adolescente. Desde los 16 años, su uso está permitido. Además de la obligatoriedad de usar el casco o circular por vías autorizadas para ello, es necesario cumplir con el Reglamento de Circulación. Por ello, se deben respetar todas las señales y seguir las indicaciones de las Autoridades. Aun así, ¿qué ocurre si un menor de edad a los mandos de una bicicleta o un patinete eléctrico comete una infracción que acarrea una multa?
De acuerdo con la información de Race, si cualquiera de las infracciones tipificadas las cometiera un menor de 18 años, serán los padres o tutores los que responderán solidariamente de la sanción impuesta al menor. Por este motivo, si la multa no es pagada por el infractor menor de edad, deberá hacerse cargo de la misma la persona que tuviera una responsabilidad legal sobre el mismo. Se trata de una medida que está contemplada desde que tuvo lugar la regulación sobre los vehículos de movilidad personal (VMP).
Cabe recordar que un MVP, de acuerdo con la información facilitada por la DGT, es un vehículo de una o más ruedas dotado de una única plaza y propulsado exclusivamente por motores eléctricos que pueden proporcionar al vehículo una velocidad máxima por diseño comprendida entre los 6 y los 25 km/h. Y bien, ¿qué tipo de infracciones podrían producirse, incluso, conduciendo una bici o un patinete eléctrico? He aquí algunos ejemplos:
- Conducir en patinete eléctrico bajo los efectos del alcohol y otras drogas: multa entre 500 y 1.000 euros en función de la tasa de alcohol, o de 1.000 euros si se trata de drogas.
- Usar el teléfono móvil o cualquier dispositivo de comunicación: multa de 200 euros.
- Llevar auriculares, conducir durante la noche sin alumbrado o prendas reflectantes, o si no se lleva casco: multa que dependerá de la ordenanza municipal del municipio.
Como ves, se han realizado importantes esfuerzos en los últimos años para regular medios de transporte que han proliferado en las ciudades a lo largo de los últimos años como alternativas al transporte público y automóviles convencionales.