La compañía eslovena Elaphe Propulsion Technologies quiere entrar en el sector de los coches eléctricos de alto rendimiento. Para ello, su propuesta no ha sido otra que rediseñar el esquema de motores eléctricos. Con ello, prometen que su proyecto puede cambiar significativamente las capacidades de los modelos de altas prestaciones, tanto los propuesto por la propia empresa, como para el resto de firmas interesadas en este concepto.
Concretamente, desde Elaphe han presentado un nuevo motor eléctrico que se puede acoplar en la propia rueda del vehículo. Aunque esta es una tecnología que ya se ha podido ver en otras muchas ocasiones (BMW está desarrollando un deportivo con hasta cuatro motores eléctricos), lo cierto es que la firma eslovena ha dado un importante giro de tuerca a todo lo visto hasta ahora, insertando a su vez unos frenos de alto rendimiento en el propio esquema.
Elaphe quiere cambiar el sector de los coches eléctricos de alto rendimiento
El motor eléctrico en cuestión ha sido bautizado como Sonic 1. Este es un bloque ultra delgado que es capaz de producir por sí sólo hasta 268 CV. Su instalación se ubica dentro de una propia llanta de 21 pulgadas. Tal es el nuevo diseño propuesto por Elaphe, que junto a este se puede ubicar también un disco de freno de alto rendimiento de hasta 400 mm de diámetro. El peso de todo este conjunto es de apenas 40 kilos.
Para muestra de la viabilidad de este proyecto, Elaphe lo ha incorporado al prototipo Italdesign Quintaessenza, un superdeportivo de diseño particular, ya que puede servir como pick-up o crossover al mismo tiempo. Este modelo adopta un motor de combustión que se apoya en estos motores eléctricos Sonic 1 (cuatro en total, uno para cada rueda), sumando así más de 2000 CV de potencia.
Para controlar todo el potencial y la propia gestión de estos motores, Elaphe ha diseñado también un software personal, el cual prometen que tiene una respuesta 20 veces más rápida que en un coche eléctrico común. Luka Ambrozic, director comercial de la marca, ha afirmado que: “El objetivo es ofrecer un rendimiento continuo. El software es el elemento clave: lo más importante es cómo se controla la potencia en cada rueda”.
A día de hoy, Elaphe se encuentra en conversaciones con varias compañías de coches eléctricos a las que poder suministrar su tecnología de alto rendimiento. Su objetivo es comenzar con las entregas a sus clientes a finales del presente 2025. Sin embargo, su proyecto no culmina aquí.
Desde Elaphe confirman que ya están trabajando en una segunda línea de motores eléctricos insertados en las propias ruedas, aunque, en este caso, no estarían pensados para modelos de alto rendimiento, sino para otros de concepción más ‘lógica’ y común. Pese a esta meta, desde la empresa pronostican que estos podrían ser una realidad alrededor del año 2032, pues el ciclo de desarrollo de estos sistemas son difíciles de adaptar.