Elon Musk y Donald Trump son dos de los rostros más conocidos en la actualidad. Los dos empresarios, uno de ellos presidente electo de Estados Unidos, han mostrado una gran relación en el último año. La incorporación de Musk a la campaña presidencial ha disparado el valor en bolsa de Tesla. La empresa vale ahora 570.000 millones más que hace un año. Sin embargo, los expertos reconocen que estamos ante uno de los casos más atípicos de la industria. Tesla vale mucho más que cualquier otro fabricante del mundo, y eso que apenas tiene grandes proyectos a la vista.
Hace apenas un par de meses Tesla iba camino de registrar su tercer año de pérdidas en los últimos 15 años que la empresa lleva cotizando en bolsa. Sin embargo, tras las elecciones del pasado mes de noviembre, hace ahora siete semanas, un repunte furioso del precio de las acciones ha cambiado por completo el panorama de la empresa. El valor ha crecido hasta los 462,25 dólares por título, un 80,14% de crecimiento. El precio de la acción casi se ha duplicado en cuestión de semanas. Gracias a ello, Elon Musk vuelve a ser el hombre más rico del mundo.

Las acciones de Tesla viven un momento dulce, pero el precio parece inflado
De hecho, es el hombre más rico que nunca ha habido. Es el primero en superar la barrera de los 400.000 millones de dólares de fortuna personal. A pesar de que este éxito es innegable, no ha cambiado nada en Tesla. No se ha producido un gran avance ni ha ocurrido nada trascendental. El valor de las acciones se debe ni más ni menos que a la llegada de Trump al despacho oval y a las posibles acuerdos de conveniencia que el Presidente y Elon Musk puedan firmar, acuerdos que no siempre deberían favorecer a Tesla ya que Donald Trump se ha mostrado muy decidido a eliminar las ayudas a los coches eléctricos de las que tanto se benefician Tesla y sus clientes.
No hay lógica alguna para que hoy Tesla valga más que hace un mes y medio. De hecho, muchos analistas de Wall Street ponen en seria duda que el valor de los títulos vaya a mantenerse al alza durante los próximos meses. Es ahora cuando Tesla tiene que demostrar qué realmente vale lo que dicen. El único gran proyecto programado para el próximo año es el lanzamiento del renovado Tesla Model Y. Deberíamos verlo a principios de curso, aunque Tesla todavía no ha dado fechas de la gran revelación. Esta es, posiblemente, la gran novedad del año, aunque en Europa el Model Y sucubirá frente al Dacia Sandero como el coche más vendido en la región durante todo 2024.
Se espera que Tesla se beneficie de la administración Trump. Musk quiere ofrecer una conducción autónoma que hoy está enormemente regulada. Sus robotaxi y robovan prometen ser los primeros vehículos de transporte automatizados realmente viables, pero para que tengan éxito y lleguen de forma masiva se necesita un cambio en la legislación y regulación americana. Cambios que podrían allanarse tras la victoria de Trump. A pesar de ello, con un mercado eléctrico global tensionado y con poca oferta de renovación por llegar, no hay ninguna razón lógica para que el precio de las acciones de Tesla valgan hoy un 12% más que hace apenas unas semanas. Nada ha cambiado, al menos a nivel empresarial.