Elon Musk se está encontrando con importantes problemas en Estados Unidos debido al robo del cobre de los supercagadores de coches eléctricos. Un proceso que requiere cortar los cables que van conectados al vehículo, con la consiguiente pérdida económica por tener que repararlos, y el hecho de que deja fuera de servicio estas estaciones ultrarrápidas para los clientes de Tesla.
Urge, por tanto, encontrar una solución efectiva, que haga que los ladrones se lo piensen dos veces antes de intentar cometer semejante acto, que es del todo ilegal, pero que resulta atractivo para los amigos de los ajeno por el alto valor que tiene el metal preciado.
Todo por el preciado cobre
![Es un problema para el que Elon Musk busca solución desde hace tiempo. Es un problema para el que Elon Musk busca solución desde hace tiempo.](/uploads/s1/95/22/52/tesla-solucion-robo-cobre-cables-carga_5_659x371.jpeg)
Como Tesla tiene muchas estaciones de carga ultrarrápida repartidas por Norteamérica, entre otras partes del mundo, necesita poner fin a estos robos, y ya está probando distintos sistemas que podríamos ver pronto en sus puntos carga públicos.
![Grabar el cableado es una opción rápida y sencilla de poner en marcha. Grabar el cableado es una opción rápida y sencilla de poner en marcha.](/uploads/s1/95/22/68/tesla-solucion-robo-cobre-cables-carga-3_5_659x371.jpeg)
Por un lado, el jefe del Departamento de Carga de la marca, Max de Zegher, ha confirmado que grabarán en el cobre que va por dentro de los cables el texto "Propiedad de Tesla", en un intento de conseguir que las empresas de reciclaje no lo compren.
Pero depende de la ética y buenas prácticas de estas últimas, que deberían denunciarlo además. Eso, llevaría a los ladrones a tener que recurrir al mercado negro, menos rentable, lo que debería traducirse en un descenso de estas prácticas.
BREAKING: Tesla has started installing new anti-theft devices on Supercharger cables.
— Drive Tesla 🇨🇦 (@DriveTeslaca) February 12, 2025
Called DyeDefender, these are stainless steel hose barriers filled with pressurized, blue-staining dye that explodes when someone attempts to cut the cable.
Will these be installed everywhere… pic.twitter.com/NOEbEhqT8H
También se está testeando el dispositivo DyeDefender, que consiste en el uso de unas mangueras que se colocan alrededor de los cables internos de los supercargadores en cuestión, por las que circula un líquido azul presurizado que sale disparado en caso de que se corte.
Esto complicaría las tareas de los ladrones, además de ensuciar a quien intentase llevarse el cobre, lo que parece haber convencido a los de Elon Musk para instalarlo en un futuro próximo.