Unas de las furgonetas comerciales más populares de Volkswagen se actualiza con una nueva generación. La Transporter y Caravelle llegan ahora con una nueva estética, mecánica y un generoso abanico de alternativas para su habitáculo. Todo ello, con la vista puesta a seguir plantando cara a sus principales rivales del sector, como las firmadas por Renault, Stellantis o Mercedes, entre otras.
La nueva Volkswagen Transporter cuenta con una estética que ya fue adelantada hace unas semanas. A modo resumen, la furgoneta eléctrica adopta ahora unos grupos ópticos más acordes al resto de la gama actual y una decoración a base de bajos de plástico negro, muy cercano a lo que presentan algunos SUV del mercado. También se ha renovado en su trasera y, por su puesto, en su puesto de mandos interior.
La Volkswagen Transportes se vuelve eléctrica
La nueva furgoneta eléctrica ha sido presentada en sociedad durante el IAA de Hannover. En el stand de la firma germana estaban apostadas dos versiones de este modelo, la Transporter, dedicada a la carga y transporte de mercancías, y la Caravelle, como alternativa para transporte de hasta nueve personas a bordo.
Dentro de la gama de estos modelos se encuentra la versión puramente comercial. Un paso por encima se encuentra la versión “Plus”, que incorpora un gran compartimiento de carga y una segunda fila para el transporte de pasajeros. Por último, la furgoneta de transporte de personas, con batalla extendida. La Caravelle, por su parte, contará con el acabado básico, Life (gama media) o Style (gama alta).
El nuevo puesto de conducción de ambos modelos está mejorado considerablemente en cuanto a la ergonomía y la tecnología de infoentretenimiento. Sobre el salpicadero reposan dos pantallas, una dedicada a la instrumentación y otra al sistema multimedia. De forma paralela, también incluye varias tomas USB y de 12 voltios, así como la posibilidad de añadir hasta tres tomas de 230 voltios.
La variante comercial de la Transporter de batalla estándar ha incrementado su volumen de carga en un 10%, con respecto a la generación anterior, llegando ahora a lo 5,8 metros cúbicos. La alternativa de batalla larga, por su parte, alcanza ahora los 9 metros cúbicos de volumen. Esta última, precisamente, es capaz de cargar hasta 1,33 toneladas, mientras que su capacidad de remolque es ahora de 2,8 toneladas (0,3 toneladas más que la generación anterior).
Bajo el capó, la Volkswagen Transporter cuenta con motores de combustión clásicos alimentados por diésel (tres alternativas), una híbrida enchufable (eHybrid) y tres propulsores totalmente eléctricos. La variante híbrida enchufable presenta una potencia máxima de 232 CV, aunque no especifica cuál es su autonomía en modo 100% eléctrico, aunque todo apunta a que esta podría ser de unos 60 kilómetros.
Por otro lado, las Transporte y Caravelle eléctricas se lanzarán con tres niveles de potencia eléctrica: 136, 218 y 286 CV. Todas estos escalones estarán alimentados por una batería de 64 kWh netos, con los que, en el mejor de los casos, su autonomía eléctrica será de hasta 336 kilómetros. No obstante, más adelante prometen que llegará una versión de menor potencia especialmente ideada para los desplazamientos por vías urbanas.