A pesar de que que la plantación de árboles resulta muy positiva para combatir el cambio climático, lo cierto es que los beneficios para el medio ambiente tardan en llegar. Las placas solares en cambio, son una fuente de energía renovable que, si bien tiene un coste elevado en muchos de sus aspectos, proporciona un avance casi inmediato en la lucha contra el cambio climático. La pregunta aquí es: ¿qué opción es más interesante para el planeta? ¿Plantar árboles o "plantar" paneles?
La buena noticia es que un estudio publicado hace unas semanas ha determinado qué alternativa es más efectiva: la plantación de semillas para atrapar dióxido de carbono en el futuro, o la instalación ahora de paneles solares.
Instalar paneles solares resulta ser más eficiente en la lucha contra el cambio climático
Para poder llegar a una conclusión en este estudio, se han tenido en cuenta una serie de variables. Entre ellas, cabe destacar la reducción del carbono atmosférico, el equilibrio energético de la superficie y la superficie terrestre requerida para disminuir las emisiones. La mejora de la tecnología en materia de energía fotovoltaica ha permitido que haya habido un clara apuesta ganadora. La inclusión de superficies repletas de placas solares permite obtener una ralentización del cambio climático.
Uno de los condicionantes más destacados a la hora de medir la eficacia de una y otra opción es la temperatura presente en el área geográfica. De acuerdo con la investigación realizada, en climas secos, una planta fotovoltaica puede llegar a ser hasta 50 veces más eficiente que la plantación de árboles. Aun así, es importante tener en cuenta que únicamente se mide la reducción de emisiones de efecto invernadero y no las externalidades positivas que puede tener, por ejemplo, el desarrollo de un bosque en el medio plazo.
A la hora de construir plantas fotovoltaicas debería primar, por tanto, el tipo de terreno que hay en el lugar. Si es probable que haya un exceso de aridez en la zona, puede ser interesante la obtención de electricidad a través de esta fuente renovable. Al fin y al cabo, se obtendrá un rendimiento de dichas hectáreas mucho antes que si se optase por la plantación de árboles y vegetación. En caso contrario, puede resultar indiferente escoger entre una u otra opción.
Se espera, adicionalmente, una mejora de la calidad de los paneles solares, por lo que su eficiencia podría ser mayor a la producción de un bosque con independencia de la temperatura que haya en un área determinada. Sea como fuere, se han tenido en cuenta otros factores adicionales, tales como la posibilidad de riesgo de incendio, variable que se ha incluido mediante una ponderación en función del tipo de terreno de que se trate y la temperatura presente en el exterior.
