Las motos eléctricas van llegando al mercado con cuentagotas, y la mayoría todavía pertenecen a segmentos pequeños, como el de los scooters. Pero hay ejemplos que demuestran que monturas cero emisiones más grandes son posibles, como es el caso de Zero, y Royald Enfield también podría dar pronto la sorpresa con una versión eléctrica con el característico estilo retro.
Sabemos desde hace unos años que el fabricante indio está trabajando en el desarrollo de este tipo de monturas 100% eléctricas, especialmente después de que mostraran el prototipo Royald Enfield Electric Himalayan, inspirado en su modelo off-road.
Una moto eléctrica al puro estilo retro
Aquello fue muy sonado en Milán (en el EICMA 2023), pues un año antes se había filtrado una fotografía en la que se mostraba la parte delantera de una moto, en la que se podía leer la denominación 'electriK01'.
Pero aquello acabó quedando en el olvido, a pesar de que algunos medios internacionales aseguraron que el lanzamiento era inminente. No supimos nada más de esta moto, pero ahora Cycle World ha descubierto el registro de una patente que confirma que el proyecto sigue en marcha.
La foto que muestra dicha patente, casa con el estilo retro de Royald Enfield, y además es similar a lo que se filtró allá por 2022, y que se dijo que tomaría el nombre de Flying Flea, como homenaje al modelo de la marca que se vendió durante la Segunda Guerra Mundial.
Una moto eléctrica con intenciones urbanas, bastante alejada de la propuesta Electric Himalayan, y con una denominación Flying Flea, que el fabricante tiene registrado hasta 2030, lo que hace pensar que este y otros modelos 100% eléctricos podrían ponerse a la venta antes del final de esta década.
Una propuesta barata
De hacerse realidad, la Royald Enfield Flying Flea sería una opción muy interesante para aquellos que quieran sumarse a la era eléctrica con un modelo que goce de una estética retro, y por un precio más bajo de lo que cuesta hacerlo ahora, pues entre las pocas alternativas que hay encontramos la LiveWire S2 Mulholland de Harley-Davidson, que cuesta 16.000 dólares en Norteamérica.