En los últimos años, los residuos plásticos se han convertido en los más abundantes del mundo y en uno de los más peligrosos. Su impacto medioambiental es enorme, no sólo por su volumen, sino también por lenta degradabilidad y su composición química. Según datos de la Fundación Aquae, una bolsa de plástico sencilla tarda en degradarse 150 años y Greenpeace alerta de que una botella de plástico no se descompone del todo hasta pasados 500 años.
El problema es que hay plástico en casi todo lo que nos rodea. Según la organización The Nature Conservacy, de seguir el ritmo de producción y consumo de plásticos actual, para el año 2050 habrá unos 12.000 millones de toneladas de plástico en nuestros vertederos o contaminando el medio ambiente.
Una de las principales herramientas para luchar contra los efectos perniciosos del plástico en el medio ambiente es el reciclaje, pero, a día de hoy, en España se recicla menos del 30% del plástico que se produce, a pesar de todas las políticas de concienciación puestas en marcha en los últimos tiempos.
Por eso, todavía tienen más valor iniciativas como las emprendidas por Cepsa, que acaba de lanzar su gama de envases de lubricantes de 1, 4 y 5 litros con un 70% de plástico reciclado en su composición.
Ya en 2018, la compañía había conseguido realizar envases con un 30% de plástico reciclado. Y ahora han querido ir un paso más allá, elevando ese porcentaje a más del doble, gracias a la tecnología tricapa. A este cambio se suma también el de las etiquetas: han reemplazado las utilizadas hasta el momento que se realizaban con plástico virgen por otras fabricadas con material 100% reciclado.
Gracias a estas iniciativas, Cepsa evitará el consumo de más de 350 toneladas de plástico virgen al año, lo que se traducirá en la reducción de más de 430 toneladas anuales de CO2. Además de haber realizado estas modificaciones en los formatos de menor tamaño antes mencionados (que pueden volver a reciclarse en el contenedor amarillo), próximamente también sustituirán los actuales bidones de plástico de 20 litros por otros metálicos. Un paso más en su compromiso con la economía circular y en su estrategia Positive Motion para ser Net Positive en 2050.
Una línea de envasado más eficiente
Estos envases van a comenzar a utilizarse en la nueva línea de envasado que la planta de fabricación y envasado de lubricantes en San Roque estrenó recientemente. Esta nueva línea, donde se envasarán los productos de 1, 4 y 5 litros, supone también una mejora en términos de eficiencia, lo que permitirá reducir el consumo energético y hacer que las actividades de la compañía sean cada vez más sostenibles.
La nueva línea de envasado de Cepsa surge para mejorar las condiciones de seguridad de los procesos, la calidad de los productos envasados, la productividad y el impacto ambiental y supone una mejora con respecto la sostenibilidad, pues los nuevos elementos incorporados tienen unos consumos de energía más reducidos que los de la anterior línea de envasado: cuentan con una mayor automatización de procesos, con variadores de frecuencia, minimizando la cantidad de fluidos en el lavado de la línea y otros elementos que permiten reducir el consumo energético. Lo que redunda tanto en una mejora en la eficiencia, como en la sostenibilidad del proceso productivo.