El Citroën CX es un auténtico icono de la historia del automóvil. Fue diseñado por Robert Opron, autor también del Citroën DS y del SM, y fabricado por la compañía francesa entre 1974 y 1991. El CX se destacó por su diseño aerodinámico y por la suspensión hidroneumática, que ofrecía una conducción suave y confortable en todo tipo de terrenos. Además, contaba con una amplia variedad de propulsores, desde los motores diésel hasta motores de gasolina de alto rendimiento.
Un automóvil icónico que sigue siendo admirado por los entusiastas de la marca por su diseño innovador, su confort de conducción y su personalidad. Poco a poco, todos los fabricantes, incluido Citroën, han ido abandonando un segmento que iba perdiendo adeptos. Pero el año pasado, la marca francesa volvió a la categoría en la que reinó hace décadas con el C5 X, una berlina con aires de crossover destinado a llamar la atención por su mezcla de formatos, pero conservando la referencia de estilo de las berlinas antiguas de la marca francesa.
Ahora, todos los admiradores del CX están de enhorabuena porque el nuevo modelo puede transformarse en él recuperando el diseño retro y manteniendo su aire futurista.
A caballo entre el pasado y el futuro
El canal chino de YouTube Bai Ning's car time ha querido responder a este sentimiento nostálgico de los admiradores del CX aplicando al Dongfeng Citroën Versailles C5 X, que es el nombre bajo el que se vende este modelo en China, un cambio de imagen exterior e interior inspirado en su predecesor.
Si bien Citroën ya no ofrece su famosa suspensión hidroneumática en ninguno de sus modelos, la alta distancia al suelo del C5 X exigía recuperarla. Un módulo de suspensión hidroneumática obtenido del mercado de accesorios se la devuelve permitiéndole variar su altura en aproximadamente 10 cm.
Sin más cambios en la mecánica, el siguiente paso es el aspecto exterior. Los pasaruedas de plástico sin pintar originales se sustituyen por sus respectivas piezas en el color de la carrocería en las ruedas delanteras, para intentar hacerlas ‘desaparecer’. Pero el cambio más llamativo está en las ruedas traseras dotadas de unas exclusivas cubiertas que ocultan la mitad de las nuevas llantas cerradas y brillantes distintivas del CX. Un símbolo de la marca que fue introducido en el DS en 1955 y se mantuvo hasta el GS hasta 1986.
Los insertos de la parte inferior de la carrocería y los parachoques reciben un acabado cromado. Se aplica el mismo tratamiento a las cubiertas de los espejos y las manijas de las puertas, haciendo juego con el borde superior de la ventana e imitando al CX original.
Ya en el interior toda el habitáculo recibe un nuevo tapizado de cuero beige para los asientos y los marcos de las puertas, molduras marrones para el tablero y detalles en Alcantara a juego en las puertas, mientras que el techo y los pilares se recubren con una gamuza naranja. Los colores claros de los materiales recuerdan a los modelos de lujo de los años 70 y 80, y logran que el C5X se reproduzca esta sensación premium especial.
Este exclusivo Citroën C5X retro-futurista se presenta, junto a un CX clásico, en este canal de Youtube mediante un par de vídeos en los que se destacan sus mejoras exteriores e interiores. Se entiende que se trata de un proyecto único que no tendrá continuidad en su comercialización.
Su nombre: ë-Hybrid
Con el kit instalado y el aspecto de un CX futurista, la versión híbrida enchufable del C5 X, la más prestacional y la más eficiente en consumos, es lo más parecido a un CX electrificado que se puede conducir.
Bautizada por la marca como ë-Hybrid, bajo el capó se encuentra un motor de gasolina de 1.6 litros y cuatro cilindros turboalimentado que se asocia con un motor eléctrico delantero que obtiene su energía de una batería de 13,2 kWh de capacidad. La potencia total del conjunto es de 225 CV que genera 360 Nm de par motor. Según la homologación WLTP, la autonomía eléctrica es de 60 kilómetros.