La NASA ha fichado a Michelin para que se encargue del desarrollo de los neumáticos sin aire del vehículo espacial que se moverá por la Luna cuando el proyecto Artemis logre pisarla.
En realidad, a quien ha seleccionado la compañía aeroespacial es a Intuitive Machines, que dispone de la iniciativa Moon Reusable Autonomous Exploration Rover, de la que Michelin es socio, junto a ALV, Boeing y Northrop Grumman.
El Vehículo Lunar Terrestre o LTV en fase de desarrollo tendrá que ser capaz de soportar temperaturas y condiciones extremas, por lo que los neumáticos tendrán que hacer lo propio. Hablamos de una exposición a la radiación solar y galáctica y a climas que pueden subir por encima de los 100ºC y bajar hasta los -240ºC.
Y en el caso de los neumáticos que utilice, no sólo deben salir airosos de esas condiciones, sino que también tiene que asegurar una capacidad de tracción durante la aventura por el Polo Sur de la Luna.
Por su parte, ALV se dedicará al sistema de propulsión, a la dirección y a la suspensión del vehículo, mientras que Boeing se encargará del diseño, la construcción, la creación de las maquetas, los planes de vuelo y las pruebas, entre otras funciones.
Tras la evaluación final de todo el conjunto, se presentará la oferta para que la NASA estime si el resultado es digno de pasar a la siguiente fase de adjudicación del proyecto LTV Services, ya que, de momento, Intuitive Machines es sólo una de las tres empresas seleccionadas para trabajar en una propuesta.
Michelin no parte de cero, porque tiene experiencia en colaboraciones que ha hecho ya con la NASA, y también en distintas soluciones de neumáticos sin aire, en cierto modo similares a la que tiene que presentar ahora.
Michelin and its partners selected by @NASA for the ARTEMIS project! NASA announced that the Moon RACER Team, including Michelin, has been awarded the Lunar Terrain Vehicle Phase 1 Feasibility Study. The team, led by @Int_Machines, also includes AVL, @Boeing & @northropgrumman. pic.twitter.com/DIjCi4KO3d
— Michelin (@Michelin) April 4, 2024
Ya en 2022 se mostró un prototipo de este neumático lunar en Las Vegas, durante el CES. Por aquel entonces se recurrió a la impresión 3D y a lo que denominan biomimetismo. Esto último hace referencia a soluciones que se inspiran en la naturaleza.
Este vehículo de pruebas tuvo que sortear el terreno accidentado de la zona del volcán francés de Lemptégy, muy parecido a lo que se va a encontrar en el terreno lunar, infestado de cráteres y rocas.
De ahí que se necesite un conjunto liviano, que sea capaz de soportar una carga de peso importante y que, además, tenga flexibilidad, también en las gomas, para adaptarse a terrenos complicados sin poner en riesgo al equipo, tanto a nivel personal como material.
Cabe señalar, además, que el Vehículo Lunar Terrestre tiene que incorporar la tecnología más avanzada en cuanto a gestión de energía, un sistema de conducción autónoma y un completo equipo de navegación y comunicaciones, acorde a las necesidades de la NASA, y en una aventura del calibre de la que estamos hablando.