Para algunos pasó desapercibido, pero en la primera entrega de la trilogía de Regreso al Futuro, estrenada en 1985, ya se hablaba del concepto de coche eléctrico.
Lo hace Emmet Brown mientras conversa con Marty McFly, al preguntar este último a Doc si el DeLorean sobre el que había construido la máquina del tiempo funcionaba con combustible normal o de alto octanaje.
De hecho, gracias a las cintas que graban con su videocámara, son capaces ellos mismos de recuperar esa información tiempo después, aunque con el hándicap de tener que encontrar una fuente de energía similar, ya que han viajado al pasado y todavía es imposible disponer de ‘Plutonio’.
Efectivamente, eso era lo que permitía en el film que el DeLorean viajara en el tiempo. O mejor dicho, una energía de 1,21 gigavatios que se obtenía a partir de una reacción nuclear y que tenía lugar en un complicado sistema denominado ‘condensador de fluzo’, equipado con dos torres de enfriamiento.
La velocidad que tenía que alcanzar el vehículo para conseguir tal hazaña era de 140 km/h y así lo asegura Brown en el aparcamiento del centro comercial de Twin Pines cuando le presenta su artefacto a McFly.
Ocurre poco antes de hacer que su perro, de nombre Einstein, viaje al futuro, de 1955 a 1985.
Es decir, que ya en el guion de la película existió sobre el papel una alternativa a los combustibles fósiles, gasolina y diésel, utilizados en el automóvil. Robert Zemeckis, Bobo Gale y Steven Spielberg quizá sabían algo…
Obviamente, aquel DeLorean no se enchufaba ni jamás se enchufó a la red eléctrica como tal. Pero sí que recibió el impacto de un rayo para conseguir la energía suficiente para devolver a Marty a su época.
Esto siempre hablando de la primera entrega de la trilogía, porque en la segunda, de 1989, el DeLorean funciona con basura, como botellas, cáscaras de plátano o incluso latas de cerveza.
En este film, el viaje es al año 2015 y los guionistas imaginaron que para entonces los coches ya volarían. El mismísimo DeLorean despegaba las ruedas del suelo.
Ya en la última película de Regreso al Futuro todo cambió y, curiosamente, el DeLorean perdió toda la gasolina después de que las flechas de un grupo de indios atravesasen el depósito.
Marty y Brown tienen que hacer uso de un tren a vapor para volver a 1985, porque en aquel momento quedaba todavía mucho, unos 100 años, para que se inventara la gasolina, tal y como explican los protagonistas en una escena.
Pronto llegará el DeLorean Alpha5, el heredero de aquel automóvil que sirvió como máquina del tiempo en la trilogía de ciencia ficción. Ahora sí, será eléctrico en la vida real.