A golpe de productos con una gran relación entre precio, prestaciones y tamaño, BYD está predeterminada a convertirse en una de las marcas más disruptivas en Europa en plena electrificación del parque móvil. Sus coches eléctricos ya compiten con los de las marcas establecidas en el Viejo Continente, y ahora su primer modelo híbrido desembarca en España para despuntar en el apartado comercial.
Los chinos han puesto precio a la versión propulsada por una mecánica híbrida enchufable de su SUV del segmento D. El BYD Seal DM-i tiene un precio en España que parte de 38.500 euros antes de aplicar ningún tipo de ayuda o campaña promocional, que son habituales y muy agresivas, normalmente, en el fabricante asiático.
A cambio de este desembolso, que en la práctica va a ser, seguramente, inferior por las distintas campañas promocionales, se obtiene un todocamino de 4,78 metros de largo, buena altura (no se ha comunicado el dato pero es evidente), 552 litros de volumen de maletero y con una buena carga de tecnología y equipamiento en cualquiera de las versiones que se elija.
Serán tres las líneas que de momento la marca pondrá a la venta en España. Se denominarán Boost, Comfort y Design, y dependiendo de por la que opte, variarán las especificaciones mecánicas. El cualquier caso, la mecánica híbrida enchufable está articulada en torno a un motor turbo de gasolina de 1,5 litros de capacidad. Las versiones Boost y Comfort comparten potencia (218 CV), pero la Boost hace uso de una mayor batería, de 26,6 kWh, para desmarcarse en la autonomía eléctrica homologada, que llega hasta los 125 kilómetros. La segunda homologa 80 kilómetros gracias a sus 18,3 kWh de capacidad.
Un dato muy llamativo que resalta BYD es que en conjunto con su motor de gasolina, la versión Boost ofrece una autonomía homologada total de 1.100 kilómetros.
La versión Design propone la variante tope de gama. Hace uso de dos motores eléctricos, uno de 150 kW (204 CV) en el tren delantero y otro de 120 kW (163 CV) en el trasero, que se complementan con el motor de gasolina para erogar un total de 324 CV. La batería tiene una capacidad de 18,3 kWh, gracias a la que homologa 70 kilómetros.
Aunque de primeras y en general puede parecer un precio alto, que lo es, lo cierto es que teniendo en cuenta el segmento en el que se ubica y su tecnología de propulsión, el Seal DM-i está posicionado de manera muy agresiva en su categoría. De hecho, entre los SUV híbridos enchufables ubicados de manera clara en el segmento D, es el más barato.
La referencia en este apartado comercialmente es el Volvo XC60 Recharge, cuyo precio es superior a los 60.000 euros, mientras que el Toyota RAV4 Plug-In Hybrid establece su tarifa de partida ligeramente por encima de los 50.000 euros en estos momentos. El Seal U DM-i también es similar en cuanto a tamaño y tecnología al Mazda CX-60 en su versión e-Skyactive PHEV, con un precio mínimo establecido en poco más de 52.000 euros.
Otros modelos comparables son los Hyundai Santa Fe y Kia Sorento, pero estos dos modelos tienen que comunicar todavía qué estructura de gama y precios van a tener después de haberse renovado recientemente tanto uno como el otro.
Un SUV híbrido enchufable que sí es más barato es el Ford Kuga PHEV, aunque este se encuentra más cerca del segmento C-SUV que del D-SUV: es 12 centímetros más corto y su maletero es mucho más reducido (ofrece 395 litros de volumen). Lo mismo sucede con los Kia Sportage y Hyundai Tucson, con prescios de partida establecidos en sus versiones PHEV en 42.000 y 45.000 euros, respectivamente.
Las 200 primeras unidades de las versiones Boost y Design tienen un descuento de lanzamiento de 3.510 euros, aplicable sólo hasta el 31 de mayo, lo que unido a la ayuda máxima del Plan Moves III, puede hacer que el precio del BYD Seal U DM-i Boost se reduzca tanto como hasta 29.990 euros y del Design hasta los 36.990 euros.
