La energía eólica es una fuente de energía renovable que transforma el movimiento del viento en electricidad mediante aerogeneradores. Estas máquinas funcionan gracias a sus grandes aspas que, impulsadas por el viento, activan un rotor que transmite la energía mecánica a un generador eléctrico. Este proceso permite que la energía se almacene en baterías o se integre en la red eléctrica, contribuyendo a una fuente de electricidad limpia y sostenible.
Aunque la energía eólica ofrece ventajas significativas, también presenta algunos desafíos. Un aspecto clave es su dependencia de la velocidad del viento: sin viento, la producción de energía se interrumpe, lo que obliga a combinarla con otras fuentes para asegurar un suministro constante. Además, la instalación de aerogeneradores conlleva un coste inicial elevado y requiere amplios espacios abiertos, lo que puede limitar su implementación en determinadas áreas.
La importancia de la energía eólica y su aplicación, también en grandes catástrofes
En España, la energía eólica, junto con la solar, ha tomado un papel fundamental en la transición hacia fuentes de energía renovables. Los parques eólicos ya forman parte del paisaje en varias regiones del país, transformando el viento en electricidad limpia y accesible. El desarrollo en este campo no se detiene, y existen innovadoras propuestas que buscan aprovechar la energía del viento con tecnologías diferentes a los aerogeneradores tradicionales. Algunas de estas ideas incluyen turbinas flotantes en alta mar y sistemas aéreos que funcionan como cometas en las alturas, optimizando la captación de vientos fuertes sin ocupar grandes superficies en tierra firme.
El diseño de los aerogeneradores y la altura de sus instalaciones son factores determinantes en su eficiencia: los vientos más fuertes suelen encontrarse a mayores altitudes, lo que ha impulsado la creación de turbinas cada vez más altas. No obstante, la tendencia es reducir el tamaño de las instalaciones en tierra y, en su lugar, utilizar estructuras flotantes o dispositivos de menor impacto físico, que aprovechen las corrientes de viento en zonas elevadas sin requerir una gran extensión de terreno.
¡China marca otro hito en la energía renovable! 🇨🇳 El sistema S500 ha alcanzado nuevas alturas, literalmente. Este dirigible, desarrollado por Beijing SAWES Energy Technology, voló a 500 metros, capturando vientos más fuertes y estables, generando más de 50 kW de electricidad. Su… pic.twitter.com/WLQXfQs2By
— Consulado General de China en Santa Cruz (@ConsuladoCHNSC) October 21, 2024
Así son los aerogeneradores volantes desarrollados en China
En China, los investigadores han desarrollado el BAT (Buoyant Airborne Turbine), inspirado en los dirigibles. Este dispositivo flota en el aire, suspendido a gran altura, y aprovecha las corrientes de viento para generar electricidad de manera eficiente y con un impacto reducido en el suelo. Este tipo de innovación abre nuevas posibilidades para la energía eólica, ampliando las opciones de generación limpia y accesible en diversas geografías y climas.
Estas turbinas combinan tecnología inflable y aerodinámica para elevarse a alturas donde los vientos son más fuertes y constantes, utilizando helio para alcanzar niveles atmosféricos que optimizan la generación de energía.
Entre sus principales características está su funcionamiento en alturas elevadas pudiendo operar a altitudes de hasta 600 metros. Esto les permite captar vientos más estables y de mayor velocidad, maximizando así su eficiencia energética.
Su estructura flotante, sostenida por helio está diseñada asemejándose a un dirigible. Esta estructura no solo mantiene la turbina estable en el aire, sino que también soporta diversas condiciones climáticas, lo que contribuye a una mayor durabilidad y rendimiento de la turbina en distintos entornos.
De esta forma se logra un aumento en la eficiencia energética al operar en condiciones de viento más intensas. Las BAT tienen la capacidad de generar hasta tres veces más energía que las turbinas de viento terrestres tradicionales. Esto las convierte en una opción ideal para zonas remotas o de difícil acceso, donde la construcción de infraestructura eólica convencional puede resultar complicada o costosa.
Las BAT ofrecen una ventaja significativa en portabilidad, ya que pueden instalarse y desmontarse rápidamente. Esto es especialmente beneficioso en comunidades rurales o en situaciones de emergencia, ya que pueden ser trasladadas fácilmente para atender demandas de energía específicas en distintos lugares.
Todas estas características implican un impacto ambiental reducido ya que, a diferencia de las turbinas convencionales, no requieren una base sólida en el suelo. Esta característica las hace adecuadas para su uso en áreas ambientalmente sensibles, minimizando alteraciones al terreno y a los ecosistemas locales.